El fin de los días coñazo

Buenas noticias: se acabaron las fiestas navideñas; sí, esas que cada vez tienen menos de navideñas. Se acabaron, por tanto, los villancicos-coñazo (¡cómo te entiendo, Juan Pedro Cosano!), las zambombas-coñazo, las aglomeraciones-coñazo para hacer compras-coñazo, los atracones-coñazo que consiguen que cojas asco a los manjares más exquisitos, los excesos de corrección política-coñazo en cosas como la Cabalgata (¡cómo te entiendo, Ildefonso Cáceres!), y las sobredosis-coñazo de esa familia a la que tanto quieres pero de la que acabas hasta… Así que, por fin podemos volver a la rutina, nuestra querida rutina, al menos hasta que se nos haga tan pesada que estemos deseando que lleguen otra vez las navidades. De este modo, en Jerez volvemos a la triste realidad de 18.500 parados (y subiendo), a los miles de paisanos emigrados, y a los que se dan con un canto en los dientes porque se quedaron aquí ganando 600 euros. Pero no pasa nada, tranquilos todos, que el consejero de Empleo de la Junta dice que Jerez atraviesa “el mejor momento de su historia en materia laboral”. ¡Tócate los…! ¡Y encima el tío es jerezano! Por favor, ¿es que no lo van a detener, o por lo menos nombrarlo persona non grata? ¡Ah, no, que es del partido de la Sánchez!, entonces igual le dedican una plaza.

Total, que, a lo tonto a lo tonto, ya estamos a mediados de enero. En plena cuesta –como siempre por estas fechas- pero este año corregida y aumentada por esa crisis económica (y moral, y social, y política) que todos estamos notando porque somos antipatriotas, pero de la que Zp ni se entera porque él sí que es un patriota de verdad; de los de corazón; de esos a los que se le quiebra la voz por la emoción y no pueden gritar “¡Viva España!”, o por lo menos “¡Viva este país!”, o tan siquiera “¡Viva esta nación de naciones!”, o en todo caso “¡Viva este concepto discutido y discutible!”. Nada de nada. Lo dicho, un patriota. Aunque, eso sí, que no falte mucho “Gobierno de España” por aquí, y “Gobierno de España” por allá. Ahora. Después de cuatro años triturándola. “Gobierno de Ex-paña”.

Volviendo al principio, ahora veo que quizá hemos cantado victoria demasiado pronto los que nos las prometíamos muy felices a partir de enero, pues los políticos han decidido empalmar la Navidad con los carnavales, y dejarse puesto el disfraz de Reyes Magos hasta el 9 de marzo. Mientras tanto nos darán golosinas, espejitos y cuentas de collar, además de prometernos felicidad, bienestar, diálogo y paaaaazzzzz, mucha paaaaazzzzz. Así que prepárense: aún quedan por delante días coñazo para parar un tren.

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La Voz, Jerez, 13 de enero de 2008. Feliz no-Navidad.