lunes, 1 de octubre de 2007

Fernando Alonso



Para cuando ustedes lean esto, la carrera de Japón habrá terminado, y puede que Alonso esté cerca de su tercer campeonato o que haya perdido todas sus opciones. Sin embargo, lo ocurrido no cambiará la actitud asesina que contra él tiene una parte de la prensa, la afición, y los que se apuntan a cualquier bombardeo, sobre todo si es contra un compatriota que triunfa. Eso, claro está, si no se ha matado en el coche, en cuyo caso todo el maldito mundo dirá que era genial y maravilloso. El hecho es que, a día de hoy, pocos deportistas han sido tan ultrajados como el vigente campeón de la Fórmula Uno: estafador, chantajista, niñato y peor que bastardo es lo menos que le dice la prensa, aunque eso no es nada comparado con lo que se lee en los foros de Internet, lugar en el que muestra su verdadera cara esa España repugnante incapaz de soportar el éxito ajeno si está asociado a una persona adusta e independiente. Porque si Fernando Alonso fuera el amigo de los niños, el mago de los autógrafos y el rey del colegueo, sería fantástico, pero como no tiene una sonrisa 24 horas al día para todo el que se le ponga por delante, entonces es un prepotente al que hay que machacar. Algunos no se enteran de que su trabajo no es actuar como el Papá Noël de un centro comercial en diciembre, sino ser el mejor del mundo en lo suyo, oficio en el que, además, se juega la vida. Tendrá muchos defectos, sí, pero, ¿cuántos somos mucho, pero mucho, más saboríos y malages que él?, ¿y alguno de nosotros es el mejor del mundo en lo suyo?

Además de ser un gran campeón, Alonso está sometido a una presión dentro y fuera de su equipo que pocos podrían resistir. Si un solo compañero mal avenido es capaz de amargarle la vida a cualquiera, imaginen cómo será que casi todos tus compañeros y jefes sean enemigos en un trabajo en el que una centésima de segundo marca la diferencia entre la gloria y el olvido. Podrá decirse que el carácter y la actitud del español han contribuido a la situación, pero lo cierto es que en McLaren no se han podido resistir a hacer patria con “su” Hamilton, y no han respetado las condiciones pactadas. Alguien debería haber advertido a Alonso de que eso es lo que pasa cuando confías en la palabra de un inglés.

Ha dicho Niki Lauda que Fernando es débil (el primero es tricampeón retirado, el segundo bicampeón en activo… ¿lo pillan?), pero es todo lo contrario: hay que ser muy duro para soportar incólume lo que está soportando. Así pues, entre viejos que ya no son los reyes del mambo, y jóvenes que creen serlo antes de tiempo, sólo nos resta enviar un mensaje al único que actualmente lo es: ¡Forza, Alonso!




La Voz, Jerez, 30 de septiembre de 2007




La carrera ha terminado. Fernando ha tenido un accidente, Hamilton no. Matemáticamente quedan opciones aunque, siendo realista, más bien pocas. Ahora, más que nunca...
¡Ánimo, Alonso!

12 comentarios:

Anónimo dijo...

Lamento discrepar, por una vez, de tus palabras, amigo Nadie. Sólo estoy de acuerdo cuando escribes eso de "sobre todo si es contra un compatriota que triunfa". Pero, a mi entender, esa injusta actitud la compensa también el absurdo interés que ha despertado Alonso por la F1.

En otras palabras, si fuéramos un país normal, tres cuartas partes de la población española no sabría, a estas alturas de la película, quién es Fernando Alonso. Por supuesto, serían cuatro gatos (literalmente) los que serían capaces de levantarse a las cinco de la mañana "para ver la carrera".

En España, en cuestión de Deportes, somos muy patriotas. Quizás sea el único aspecto en el que lo somos. Dejando el fútbol aparte (que ése se sigue siempre, pese a que los nuestros estén permanentemente abonados al fracaso, cuando no al ridículo), nos aficionamos a un deporte si gana "uno de los nuestros". Me parece absurdo.

Nunca he seguido la F1. Dudo mucho que lo haga. Si Alonso gana el Mundial me va a dejar tan indiferente como si un matemático español gana el Nobel.

Me encanta el ciclismo, pero dejé de seguir el Tour a partir de Indurain. Sencillamente, me aburría. No me considero menos patriota por ello. Con Perico iba a muerte (me aficioné gracias a él).

Me gusta mucho el tenis, y me encanta Nadal, pero también Federer. Y si juegan los dos una final como la última de Wimbledon, me quedo exactamente igual de agradecido a los dos por el fantástico espectáculo que dieron, gane quien gane (aunque, en esta ocasión, fuera el suizo). Al tenis me aficionaron, por cierto, McEnroe y Borg.

Podría seguir, pero iré cortando para no aburrir.

Ese sector "asesino" del que tu hablas es insignificante. A mí me parece tan triste la postura de estos como las de los nuevos "expertos" en F1 que ha dado el país en dos años. es decir, dos de cada tres españoles. Esa postura contribuye, únicamente, a enriquecer las arcas de unos señores que han creado un dios al que se cargarán cuando deje de producir beneficios. Hablo, en este caso, de los señores de Tele5 (pero, vamos, el día de mañana serán otros medios los que creen otros dioses y nos los vendan con pasmosa facilidad).

Los que llaman "niñato" a Alonso no se alegran de sus derrotas. En el caso de los aficionados, es una pose que vende. En el caso de los periodistas, ellos no están sacando tajada ahora, y lo harán cuando el dios se apague. Es así de sencillo. Y, desgraciadamente, no pasa sólo en España.

Un fuerte abrazo.

Anónimo dijo...

Querido Ray (¿porqué ex?):

Creo que aciertas en el circunstancial interés que la F1 ha despertado entre los españoles y que, en gran parte, desaparecerá cuando Fernando deje de competir e incluso cuando deje de ganar.

Ahora bien, creo que te equivocas en lo del sector "insignificante". Como bien dice Nadie, no hay más que darse un paseíto por lo foros para apreciar la inquina con la que algunos arremeten contra el asturiano. Y el motivo es exactamente ese, el habitual, el odio al éxito del próximo.

Ejemplos: Que Rossi es un excepcional piloto no lo duda nadie, pero en España hay más tifossi de Valentino que en la propia Italia y son los mismos que ponen a parir a Pedrosa, precisamente porque Dani es, según ellos, "un creído y un antipático". Curiosa similitud, ¿verdad?

Tu citas a Nadal y a Federer. Pues bien, las coincidencias vuelven a repetirse. Sin dejar de reconocer que Federer puede que sea el mejor jugador de la historia del tenis, los "anti-nadalistas" acusan a Rafa de una presunta chulería y palurdez que no debería permitirle acercarse al "divo" Roger.

Y todo lo que te comento es fácilmente comprobable en los foros que anteriormente comentábamos.

Es más, casi me atrevería a afirmarte que tengas un poco de paciencia y esperes a ver las distintas entradas que pueden llegar a aparecer en este comentario.

...tiempo al tiempo.

Nadie dijo...

He de decir que yo soy aficionado a la F1 desde tiempos de Niki Lauda y, asímismo, no me avergüenza decir que Alonso ha revitalizado mi pasión por ella. Sí, me levanté a las 6 de la mañana del domingo para ver la F1 en casa de Kaiser. No disfrutamos, sufrimos. Nos cae bien Alonso. No porque sea español, pero, desde luego, nos gusta que un español sea número uno en algo, ya sea formula uno, o matemático digno del Nobel. Tele 5 no saca más beneficio con la F1 que aquél del que se haga acreedora atrayendo espectadores, ¿es malo?
No es malo que la gente se aficione a un deporte cuando un compatriota destaca en él, aunque sí que surgan expertos de la noche a la mañana. El interés por Alonso no es absurdo ni deja de serlo. Lo es si se compara con las guerras del mundo, el hambre y todo eso, pero, por suerte o por desgracia, no sólo de tragedias vive el hombre. Al menos el hombre occidental acomodado (nosotros).
Yo también dejé de sentir interés por el ciclismo cuando se retiró Induráin. Y era aficionado incluso antes de Perico, ¿y qué?

Lo que a la gente le jode de Alonso es que no habla ni actúa en función del "qué dirán". Y eso la gente no lo soporta. Pues eso, que se jodan. ¡Fuerza, Alonso!

Anónimo dijo...

Hombre, yo me aficioné a la F1 con Ayrton Senna, el más grande de entre los grandes. la verdad es que tras Nigel Mansell y Damon Hill perdí un poco el interés, y no precisamente por la abrumadora superioridad de Schumacher, sino porque dejaron de televisarlo, y eso inevitablemente, hace que pierdas un poco el hilo.

Ahora lo he recuperado, y también reconozco que gran parte de culpa la tiene Alonso, por su condición de español, pero no solo por eso: el par de vueltas que estuvo presionando a Massa hasta que le adelantó en el gran premio de Alemania con la pista mojada, ha sido uno de los momentos más emocionantes que he vivido en el mundo del deporte en este año; a cada frenada me despegaba un poco más del sillón desde donde veía la carrera.

Aún así, debo reconocer que mi interés por el mundo de la F1 no llega a tanto como para levantarme un domingo a las 6 de la mañana...

... ¡¡¡VAMOS, UN DOMINGO YO NO ME LEVANTO A LAS 6 DE LA MAÑANA NI POR MI PADRE!!!

JJJAAAAA, JJAAA, JA, JA, JA, JJJJAAAAAAA......

Anónimo dijo...

Insisto: los foros de los que me habláis son una parte insignificante en comparación con la magnitud de la campaña anti-Hamilton (por cierto, más allá de todo lo que se diga, magnífico piloto, creo).

Me hablas, Mafd, de que Nadal cae antipático también. ¿Viste el frente común que se hizo cuando Djokovic (magnífico tenista, afirmo) se burló del manacorí después de un partido?

¡Pues eso! Que son posturas, poses, que quedan muy bien, pero falsas e insignificantes. ¿Qué importancia tiene?

Jesús Sanz Rioja dijo...

Tal como está el patio, hay que jalear a todo compatriota que destaque en algo y que no diga que España se la sopla.

Anónimo dijo...

¡Hombre!, Es que Djokovic (magnifico tenista, ciertamente) es bastante payaso ¿no?.

Creo que muchos de sus compañeros pueden sentirse ridiculizados con sus "imitaciones".

Por otra parte, no se puede decir que sea Carlos Latre, precisamente.

En definitiva, no es que la cosa tenga una importancia vital. Claro que no. En este caso, ni siquiera creo que tenga que ver con corrientes antiespañolistas o sentimientos antinacionales. Es simplemente un indicativo de uno de los "pecados" que más nos adornan a los españoles:

la ENVIDIA.

Díaz de Vivar dijo...

Pues yo no es que no me levantase el pasado Domingo para ver la carrera, sino que empalmé: esa noche me llamaron para currar y, al llegar a casa a las 6 de la mañana, metí una cervecita con limón en el congelador, partí unos trozos de empanada y a ver la carrera con mi padre (que sí se levantó).

Que esto sea ridículo o no... pues hombre, vistos los dos primeros "capítulos" de mi "serie" en mi blog no me queda duda acerca de lo que realmente es patético.

Comparto, al 100%, lo que dice Nadie: como Alonso va a su bola, no le ríe las gracias a casi nadie y, además, TRIUNFA, pues en este país de envidiosos, puñeteros y traidores para todo aquel que destaca, se le atiza sin compasión.

Por cierto: no se a qué hora será la carrera de China (de madrugada también, pero no se la hora exacta) pero me han vuelto a llamar para currar por la noche y, cuando vuelva, VEO LA CARRERA DE JAPÓN. Con cerveza con limón, con cola o con bourbon, pero la veo.

Porque Alonso ha despertado mi "absurdo interés por la F1". Y Hamilton (El Trampas), toda su familia chupacámaras y Dennis que se vayan al carajo, los muy hijos de... ¡la Gran Bretaña!.

¡Ánimo Alonso!. Y ¡¡¡¡VIVA ESPAÑA!!!!, coño.

Anónimo dijo...

lo que me sorprende a mí es esa imagen tan triste de España y los españoles que tenéis algunos. Si Alonso es un sieso qué le vamos a hacer, igual que Raúl el del Madrid, y eso nadie lo niega. Que Alonso triunfe le agrada a todo español, pero a mí, que de la f1 no me interesan ni las polémicas, me importa un pimiento si Alonso se sale de la pista y se estrella y pierde. Que gana, olé sus huevos, que no, pues qué le vamos a hacer. Pero eso sí, que el chaval es antipático, eso no lo niega nadie, pero no por ello se le va a tener envidia ni nada parecido. A mí me gustaría que nuestros ídolos fueran simpáticos y dieran ejemplo de educación, que para eso cobran lo que cobran. Son una fuente de generar dinero gracias a sus aficionados, a los que les deben, al menos, una sonrisa de agradecimiento. Sin ellos, no serían nada.

Nadie dijo...

Pues yo no lo veo tan antipático al chiquillo, qué quieres que te diga. Otra cosa es que sea serio.

Anónimo dijo...

Qué va, Pep, el chaval no es sólo serio, es un antipático de marca mayor, pero vamos, yo le deseo que triunfe, sobre todo que vuelva a triunfar a partir de la temporada que viene, porque esta... lástima de ingleses y alemanes. Al final fíjate que los franceses van a ser mejores personas. Si es que...

Anónimo dijo...

Hace una visita a esta dirección:

http://www.petitiononline.com/fealonso/petition.html

Saludos.